El Guardia engañado
Caminaba un loco por el patio en la hora del recreo en un manicomio, el loco traia un cepillo de dientes amarrado en una cadena para perros.
El guardia lo ve y piensa:
- "Cuando quiera entrar lo voy a engañar".
Cuando el loco quería entrar le dice el guardia:
- 'Lo siento pero no se permite la entrada de animales', a lo que el loco responde:
- '¿Pero no ve que es un cepillo de dientes?. El guardia al no tener otra opción le permite entrar.
El loco, una vez dentro , toma el cepillo sobre su mano y lo comienza a cariciar mientras dice:
- 'Lo engañamos, Firulais.'
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